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La ley del Karma… como nuestras decisiones impactan nuestro futuro

Lo que hemos hecho, su resultado, viene a nosotros ya sea hoy, mañana, cien años más tarde o cien vidas más tarde, sea cuando sea. Y eso es nuestro karma. Es por ello que esa filosofía está en toda religión: matar es pecado. Matar es pecado en toda religión.

Maharishi Mahesh Yogi

 

Hace poco más de diez años, en un momento difícil de mi vida, donde tenia más preguntas que respuestas, tuve la maravillosa oportunidad de coincidir con un ser de luz, un amigo entrañable que ya no esta en este plano, quien había decidido estudiar a fondo la metafísica como doctrina de vida. Este amigo especial vivía entre libros, literal, su vida se había transformado en un claustro, del cual solo salía para ejercer maravillosamente la ingeniería como profesión, como un guía, asesor, experto con experiencia comprobada. En su camino hacia la vejez había descubierto en la metafísica un tema curioso que daba respuesta a muchas preguntas que no lograba obtener. 

En una cena especialísima, logramos sacarlo de su cueva y llevarlo a un momento de esparcimiento donde la charla siempre era un tema central para mí. Este personaje por demás profundo me invitaba a adentrarme en esa doctrina y me regaló interminable bibliografía para iniciarme en el camino. A modo de confesión, nunca tuve tiempo de leer más que un par de capítulos y nunca me enganché con la metafísica con un interés real. 

Lo que, si ha sido un credo para mi durante toda mi vida consciente, es que existe en la vida un ciclo de eventos que van y regresan, como respuesta a muchas de nuestras acciones…este ciclo trae lo que llamo Karmas y estos pueden resultar en impactos positivos o negativos. 

Yo debo agradecer al universo la energía generalmente positiva que siempre me acompaña y lo veo reflejado en la gran cantidad de personas con las cuales tengo una cosa común que puede llamarse empatía, compromiso, vibración o afinidad, pero también debo reconocer momentos en mi vida actual, que me han llevado a una profunda reflexión… y son esos momentos cuando me he preguntado ¿Por qué yo?, ¿Por qué a mí? Si siento que no he merecido un resultado. 

Me paso muchísimo, por ejemplo, cuando me preguntaba por qué en esta vida no había sido bendecida con la maternidad , y recuerdo perfectamente que en ese momento busqué muchas respuestas que no llegaban y otras un poco extrañas que me decían, que en esta vida estaba pagando un Karma de vidas anteriores, por haberme practicado un aborto; como podrán imaginar, esta respuesta que provino de una persona espiritual quien me manifestó haber tenido esa “revelación” sobre mi vida, salió a relucir en la cena con mi amigo de luz, quien soltó su copa y todo eufórico me comentaba que para eso necesitaba estudiar la metafísica…a modo de preparar mi posterior vida reencarnada, libre de karma. 

Considerando esa pausa como uno de los tantos episodios por contar de mi vida complicada, retomo el tema del karma tal como lo veo. 

Hay personas que durante toda su vida van acumulando resentimientos, deudas monetarias, mentiras que han ocasionado daño mortal o han marcado a otras personas o familias y uno no puede entender como se muestran livianos, pasivos, confiados; uno los imagina durmiendo en paz con su almohada y un incendio tras su puerta. He conocido personas así en este trayecto. Estas personas formaron parte de mi vida en algún periodo, compartí con ellos lo que pensé era una amistad sólida, vivimos momentos de alegría y confianza, planificamos proyectos futuros, nos arriesgamos a emprender una sociedad y así un largo etcétera. 

A veces no vemos la realidad ante nuestros ojos y nos sorprende de forma dolorosa cuando descubres los rostros detrás del antifaz, pero segura estoy que el karma aparecerá en determinado giro de la rueda que es la vida, y muchas veces vemos representado el mismo como una afectación que llega incluso a la familia inocente.  

Aunque todos en este mundo tenemos acciones cuestionables que hemos cometido, la delgada línea entre aquello mal hecho que repercute solo en nosotros y pasar esa línea afectando a otros, debe ser la base para tomar nuestras decisiones. 

Con nuestro conocimiento de las repercusiones que pueden traer nuestras acciones, debemos analizar ante todo,en que medida estamos afectando la vida de otros, en que medida estamos comprometiéndolos,en que medida puedo responder ante lo que ofrezco, en que medida me importan los demás, cuan tranquila quiero irme a descansar sobre mi almohada, cuanta satisfacción siento al ser reconocida como una buena persona dentro de la sociedad, cuanto orgullo siento al ser reconocida como una persona de palabra. Estas serian algunas de las preguntas que debemos hacernos antes de tomar cualquier acción que involucre a otras personas. 

Por el contrario, si decides huir de las responsabilidades, sin importar cuantas familias has afectado en tu camino, dando la espalda a la responsabilidad, es muy seguro que estés comprando tu propio karma negativo…ese que te va a llegar en vida o tal vez cuando te toque dar cuentas en el otro plano. 

¡¡¡Yo creo en el Karma e intento cada día anotar en mi Check List cosas positivas y asumir con responsabilidad las negativas que deba afrontar… pero nunca huir … nunca huir!!! 

No se puede correr por la vida sin tener la necesidad de descansar!

¡¡Paz y Bien!!